Loic Chetout, corredor del GSC Blagnac, dió un golpe de mano en la última etapa de la Vuelta al Bidasoa, para llevarse en solitario la etapa y vencer en la General final.
Chetout, nacido en Baiona pero formado como corredor en nuestras carreteras, atacó en las últimas rampas de Erlaitz para irse en solitario y realizar una auténtica exhibición tanto en el tramo final de subida como en el complicado recorrido desde el alto hasta la meta del Paseo de Colón irunés, donde llegó con 23 segundos sobre un grupo de cuatro corredores, y con 30 segundos sobre el italiano Iuri Filosi, líder y dominador de la prueba en las primeras etapas.